Poner fin a la errancia médica
“Puede que la Covid mate a la gente, pero el EBV destroza la vida de las personas y nadie habla de ello”.
“El virus de Epstein-Barr ha destrozado mi vida y la de mi familia”.
“Durante seis años me dijeron: es psicológico”.
“He sufrido la errancia médica a causa del EBV. Los médicos me tuvieron 5 años sin un diagnóstico real”.
EBV, el virus que puede pasar desapercibido
La gran dificultad con el EBV es que la infección, incluida la mononucleosis, puede pasar completamente desapercibida o manifestarse con solo algunos síntomas comunes como dolor de garganta, fatiga intensa que fácilmente pueden confundirse con otras enfermedades. Además, como el EBV no siempre está en la mente de los profesionales sanitarios, es poco habitual que se pida una prueba del EBV a los pacientes.
La errancia médica podría reducirse si el EBV se analizara de forma más sistemática.
A diferencia del herpes zóster o el herpes labial, el virus de Epstein-Barr no presenta síntomas físicos específicos.
Enumeramos a continuación los síntomas más frecuentes, teniendo en cuenta que pueden variar de una persona a otra:
Síntomas en fase aguda (mononucleosis infecciosa)
- Fatigue
- Malaise
- Mal de gorge
- Fièvre, frissons, courbatures
- Gonflement des ganglions lymphatiques – cou, aine, aisselles (= adénopathie lymphatique)
- Œdème des paupières, face gonflée
- Apparition de boutons ou plaques rouges (= rash cutané)
- Baisse de l’appétit
- Inconfort abdominal
- Douleurs articulaires et musculaires
Síntomas de la primoinfección persistente
- Fiebre
- Ganglios linfáticos inflamados (= adenopatía)
- Aumento de tamaño del hígado y del bazo (= hepatoesplenomegalia)
- Fatiga persistente
- Dolores articulares y musculares
Síntomas de la reactivación del EBV
- Niebla cerebral
- Infecciones recurrentes
- Fatiga persistente
- Fiebre
- Inflamación de los ganglios linfáticos (= adenopatía cervical)
- Erupción
- Malestar
- Aumento de tamaño del hígado y del bazo (= hepatoesplenomegalia)
- Dolores articulares y musculares
Consejo : Preste también atención a los posibles problemas periodontales, hepáticos o disbióticos.
Solicitar pruebas del EBV
La infección vírica por EBV no se suele buscar de forma automática debido a la “banalidad”de los síntomas: como mucho, se diagnostica una virosis, es decir, una infección causada por un virus, sin más detalles…. El médico que no esté familiarizado con el EBV no pensará necesariamente en ello de entrada…
En consecuencia, se corre el riesgo de pasar por alto el diagnóstico durante la primera fase de la enfermedad. Por lo general, solo cuando los síntomas se mantienen durante más de 2-3 semanas y a petición del paciente, se realizan pruebas biológicas para identificar el agente vírico responsable de los problemas clínicos.
Consejo: En caso de duda, insista en que su médico le haga una prueba del EBV para confirmar o descartar esta posibilidad.
Ya no es siempre fácil diagnosticar una mononucleosis de forma rápida, qué decir de la reactivación. Los síntomas son aún menos característicos y es sobre todo la insistencia del paciente y el instinto del sanitario lo que marca la diferencia: tener en mente el papel que desempeña el EBV en un buen número de patologías debe convertirse en un reflejo fundamental… Y no olvidemos que una serología del EBV (análisis de sangre) permite confirmar fácilmente el diagnóstico clínico.
A diferencia del virus de la varicela-zóster o del herpes labial, que también son virus que se reactivan, el virus de Epstein-Barr no presenta síntomas físicos específicos: por eso puede ser útil recurrir a análisis biológicos para obtener más información.
Formule sus preguntas sobre el virus de Epstein-Barr
Como se tiene menos miedo a lo que se entiende mejor, le animamos a plantear sus dudas a los que estudian este virus.